La forma en que percibimos la ciudad, el uso que hacemos de los diferentes espacios y el inmobiliario urbano, son elementos que debemos tener en cuenta para poder hacer un análisis completo en materia de Seguridad Ciudadana, que involucre no solo elementos de carácter político, económico, social, jurídico y policivo, sino también elementos propios de nuestro Hábitat, a los cuales no les prestamos la importancia necesaria y afectan de manera directa la construcción de una ciudad con mejores condiciones de seguridad, ya que finalmente es en el espacio público y privado donde tienen lugar todas y cada una de nuestras actuaciones a nivel urbano.
A continuación presentamos algunas reflexiones en torno a la importancia de nuestro compromiso con elementos como la Iluminación y El Orden en el Espacio Público, elementos que debemos mejorar e instrumentalizar desde la administración pública, la empresa privada y la ciudadanía como herramientas que nos permitirán construir una ciudad mucho más segura, prospera y agradable.
Iluminación:
“ESPACIO + BUENA ILUMINACION = PRESENCIA NATURAL DE PERSONAS = APODERAMIENTO DEL ESPACIO = MAYOR SEGURIDAD”7
En Bogotá, las actividades laborales, comerciales y académicas no se desarrollan exclusivamente en la jornada diurna, muchas personas deben trabajar y estudiar al mismo tiempo, razón por la cual la vida nocturna de la ciudad es muy activa. La ciudad demanda que existan las condiciones adecuadas en materia de seguridad para poder desarrollar estas actividades de forma segura y poder desplazarse en horas de la noche hacia los hogares, lugares de trabajo o sitios de esparcimiento, para esto es necesario contar con un sistema de iluminación urbana que involucre dentro de su diseño e implementación la perspectiva de la seguridad ciudadana desde un enfoque de responsabilidad y compromiso compartido entre la administración pública, la empresa privada y la ciudadanía que nos permita instrumentalizar el Alumbrado público y privado de tal manera que podamos avanzar en la construcción de una ciudad más segura.
La importancia y la complejidad del impacto que tiene la iluminación se puede dimensionar si tenemos en cuenta que “La iluminación urbana influye sobre las emociones de los observadores, por lo que las consideraciones emocionales no deben ser omitidas en su diseño, sino que es necesario incorporarlas como un aspecto importante de mejoramiento de la calidad ambiental de la vida urbana y para el sentido de bienestar emocional del propio usuario” 8. Se ha encontrado que la iluminación tiene impacto en algunos aspectos emocionales, los cuales han sido definidos en relación a los siguientes requerimientos:
“o Requerimientos afectivos/cariño.
o Requerimientos de placer /juego.
o Requerimientos de significación/fascinación.
o Requerimientos de seguridad /protección”9
Recordemos que “Utilizar la luz para insuflar vida a espacios y dotarlos así de una nueva dimensión de atractivo es una de las principales aspiraciones que se persiguen en numerosos municipios mediante planes maestros de iluminación o proyectos concretos”10 , mientras esto ocurre en otros lugares, en nuestra querida Bogotá hay sectores que cuentan con una iluminación deficiente que crea el clima para la inseguridad y desincentiva el uso de nuestros espacios.
La instrumentalización de la Iluminación y los criterios para su implementación no deben ser priorizados única y exclusivamente desde una perspectiva económica y empresarial que se limite a satisfacer “los criterios estéticos, funcionales y ecológicos manteniendo unos costes operativos bajos”11. Se requiere incorporar el criterio de la Seguridad Ciudadana, para poder avanzar en la construcción de entornos urbanos que desincentiven el accionar delictivo y protejan a cada uno de nuestros conciudadanos de quienes aprovechan la oscuridad para perpetrar sus crímenes, teniendo en cuenta que si decidimos ofrecer una iluminación deficiente por ahorrar dinero, el precio que pagaremos por hurtos, lesiones personales y la erosión del sentido de pertenencia será mayor en el corto, mediano y largo plazo.
La utilización adecuada de los elementos del mobiliario urbano también se encuentra fundamento en la CPTED (Crime Prevention Through Enviromental Design), o Prevención del Crimen mediante el Diseño Ambiental, una estrategia que deberíamos implementar en Bogotá, la cual:
“es una estrategia de minimización de la delincuencia a partir de la conjunción de disciplinas como diseño urbano, arquitectura, psicología y criminología. (…) para reducir las oportunidades de cometer delitos, aumentando el riesgo y el esfuerzo de los delincuentes. El diseño y el uso del medio ambiente afecta directamente el comportamiento humano y tiene influencia tanto en la percepción del temor como en las posibilidades de que ocurran delitos, lo que afecta directamente la calidad de vida de las personas”12 .
La iluminación adecuada es un elemento fundamental en desarrollo de la estrategia CPTED, y para ser aplicada en Bogotá necesitamos la sinergia entre la administración pública y la empresa privada, toda vez que en Bogotá “El servicio de alumbrado público es operado y prestado por la Comercializadora y distribuidora del servicio de energía — CODENSA S.A. ESP”13 .
Es necesario que haya articulación interinstitucional y que todos los responsables de la iluminación en Bogotá, ya que actualmente CODENSA S.A. solo se hace cargo del mantenimiento de las luminarias y la UAESP (Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos) se encarga de la iluminación y de la repotenciación de la luz.
“Una buena iluminación permite el uso del espacio (tanto público como privado) de modo más intenso, especialmente de noche. La presencia natural de personas tiene como resultado un mejor apoderamiento del espacio público por parte de la comunidad. Así, las luminarias apropiadas al uso y dimensiones del espacio público colaboran en la reducción de los delitos de oportunidad y la percepción de temor, ya que al delincuente no le gusta ser visto, y el usuario del espacio público siente mayor control sobre éste si es capaz de observar con un campo visual profundo y despejado” 14.
No todas las estrategias de prevención de actos delictivos están en manos de la policía, se necesita de la sinergia interinstitucional a nivel distrital para poder dar respuesta a los siguientes problemas relacionados con la Iluminación:
– “Luminarias mal distribuidas que crean bolsones de obscuridad y no apoyan espacios con actividad.
– Luminarias con poca intensidad y que no permiten distinguir nítidamente las facciones de una persona que se aproxima de frente a una distancia de 15 m. (distancia media establecida para dar tiempo de reacción frente a una ¨percepción de peligro¨).
– Iluminación obstaculizada por vegetación.
– Luminaria destruida por falta de protección (altura inadecuada y ausencia de canastillos de protección)”15 .
[pie][7] “Espacios Urbanos Seguros. Recomendaciones de diseño y gestión comunitaria para la obtención de espacios urbanos seguros”, Banco Mundial, Asociación Chilena de Municipalidades, Gobierno de Chile, Chile.[/pie]
[pie][8] Calvillo Cortés Amparo Berenice, “Luz y emociones: Estudio sobre la influencia de la iluminación urbana en las emociones; tomando como base el diseño emocional”, Universitat Politècnica de Catalunya, Tesis Doctoral, Pág. 151.[/pie]
[pie][9] Ibíd.[/pie]
[pie][10] ERCO, “Luz en espacios exteriores. Diseño. Luminotecnia. Práctica de planificación”, Pág. 17, Disponible en: http://www.erco.com/download/data/30_media/69_lightintheoutdoorarea/es_erco_lightintheoutdoorarea.pdf[/pie]
[pie][11] Ibíd. Pág. 4.[/pie]
[pie][12] Fundación Paz Ciudadana, “Espacios Públicos para la prevención del delito: Una propuesta Innovadora Importada desde Canadá”, En: C o n c e p t o s, No 29, Pág. 1, Disponible en: http://www.pazciudadana.cl/docs/pub_20110221115106.PDF[/pie]
[pie][13] Unidad Administrativa Especial Servicios Públicos, “Proyecto de inversión 582 «Gestión para el servicio de alumbrado público en Bogotá, D.C» “, Subdirección de servicios funerarios y alumbrado público, Bogotá, Pág. 5[/pie]
[pie][14] Op.cit, “Espacios Urbanos Seguros. Recomendaciones de diseño y gestión comunitaria para la obtención de espacios urbanos seguros”, Banco Mundial, Asociación Chilena de Municipalidades, Gobierno de Chile, Pág. 37.[/pie]
[pie][15] Ibíd., Pág. 39.[/pie]